Francina y Rubén son una pareja jovencita y muy divertida, celebraron el día de su boda con una ceremonia en la casa de cultura de Felanitx, para después ir a pasar una estupenda velada y cena en el restaurante del Hotel Ca’n Bonico, en Ses Salines. Francina durante todo el día tenía los sentimientos y la emotividad a flor de piel, una novia de lo más encantadora!!!   Toda la familia me hizo sentir muy cómodo durante todo el día de reportaje donde lo pasamos todos muy bien. A los pocos días ya estábamos realizando las fotos del postboda, una sesión de fotos en estos días llenos de colores otoñales con fuertes contrastes y unos cielos preciosos, el mar en calma y una temperatura de lo más agradable!!!!

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